Hola,
He estado leyendo varios artículos sobre la relación entre la salud dental y el rendimiento deportivo y me parece interesante hablar de ello pues es algo que parece que no tiene ninguna rellación y en la que los que realizamos deporte podemos dejar a un lado.
En la boca se acumulan millones de bacterias muchas de ellas exclusivas de esta región y no existen en ningún otro lugar. En la boca se forman placas como consecuencia de la ingesta de alimentos formándose cúmulos de gérmenes que se pegan a los dientes causando en muchos casos caries y, en otros, enfermedades en las encías. Los alimentos azucarados son los más perjudiciales pues las bacterias que se forman a causa de estos alimentos producen más ácidos que destruyen el esmalte dental.
Cuando las encías se ven afectadas o la infección llega a la raíz de las piezas dentales, esta infección llega a la sangre y, desde aquí, ya hay vía libre para que la infección se traslade a cualquier parte del organismo.
La sangre va depositando todas estas bacterias y microbios en los músculos y articulaciones provocando múltiples enfermedades, fundamentalmente en deportistas que someten a estos miembros a auténticos desgastes. Así , es muy fácil que se produzcan desgarros, dolores articulares, lesiones tendinosas ...
Dado que el origen de la infección ocurre en un sitio tan distante, la persona no suele relacionarlo y pueden pasar meses, incluso años arrastrando el dolor sin conseguir eliminarlo.
Hasta que un día, se decide acudir al odontólogo para curar esa caries que, de repente a empezado a doler bastante y, por arte de magia, al cabo de unas semanas el dolor muscular desaparece.
He oído varios casos en los que ha pasado ésto, por eso me ha parecido interesante comentarlo. Y es que los que hacemos deporte de intensidad media y alta debemos cuidar nuestra salud desde todos los aspectos sin olvidar ningún detalle pues cualquier afección puede tener consecuencias en nuestro rendimiento deportivo y, sobre todo, provocar lesiones.
Yo, afortunadamente, sufrí hace tiempo un dolor en las encías y cogí miedo y la verdad es que hace años que cuido muy bien los dientes. Cepillado después de cada comida, hilo dental a diario o cada dos días y me hago una limpieza dental al año. Como buen deportista no abuso de azúcares ni de bebidas azucadas. Con todo ésto la verdad es que he logrado mantener a ralla a los millones de microbios que deben estar pululando por mi boca. Espero que siga así por mucho tiempo.
Un saludo y hasta otra.
Cefaleas de origen cervical
Hace 2 años
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